noviembre 30, 2010

El acero aprestad el bridón






"La independencia siempre fue mi deseo; la dependencia siempre fue mi destino".
Paul Verlaine







Conforme pasan las horas, mi nostalgia se va acrecentando ya que está por esfumarse el penúltimo mes del año, a menos claro está que suceda un milagro – blasfemia de un desesperado ateo-  en unas cuantas horas hará su aparición oficialmente, el mes de diciembre.

Época que demuele, a todo grinch de corazón como lo es su servilleta. Si bien mi único consuelo es que también acabará el multimanoseado año bicentenario.

Sin duda se dejó pasar –seguramente con toda oficial intención- la oportunidad de reflexionar, analizar, recapacitar, examinar y razonar –diría la Micha-. La posibilidad para enderezar el camino, enumerar el recuento de daños y de una vez por todas hacer de este México un mejor lugar donde vivir, y erradicar el verbo sobrevivir.

Pero como tantas cosas que acontecen en este país, el trabajar por el bien común no pasa de ser una quimera jibariana.

Y como a partir de mañana todo o casi todo convergerá en festividades insulsas, brindis oficinísticos donde nos veremos obligados a soportar las mismas mentiras de nuestros congéneres, ¡como si la convivencia diaria! no despertara  rencores africanos y alucinantes luchas territoriales. Además de estar obligado a ser feliz, no importando que este móndrigo año me haya tratado peor que al Cristo de Mel Gibson.

 En fin se acaba  noviembre y prácticamente con él, este año rebosante de verde, blanco y rojo.
Y para despedir los 200 años de ser orgullosamente mexicanos, les pongo unas imágenes que tomé, del monumento más representativo de la “emancipación” de este país, me refiero desde luego a la columna de la independencia, o el “ángel” como le llamamos popularmente por acá, nombre incorrecto ya que –como bien saben- el dichoso angelito no es ningún trans con alitas. Es ni más ni menos que; Niké –¡sí! así como los tenis- “La victoria alada de Samotracia”.

Vaya pues un pequeño homenaje a nuestra… nuestra... esa que dicen que nuestros héroes nos dieron.
…gracias al valor y a los anhelos de los caudillos que ofrecieron su vida a cambio de una Patria, en la que prevaleciera la igualdad, la democracia, la fraternidad, la tolerancia, la legalidad y el reconocimiento y respeto a los derechos humanos… Bla bla bla.


¡Viva México!

Inicialmente tome fotos de los cuatro costados, esta corresponde al lado sur. Pero chin, no pude evitar que saliera el edificio de Scitum –no muy nacionalista que digamos-

En el ángulo inferior izquierdo se ve  el edificio de Scitum


Así que probé por el lado norte –aunque tampoco hubo patriótica suerte-.

Ups, salió el Sheraton

El oriente fue el peor;
 
Sin palabras


 por lo que cruce los dedos y fui a la última esquina:

La madre patria ¡presente!



Después de tan vergonzosa experiencia fotográfica, empecé a sentir un desvanecimiento de ese: “orgullosamente independiente” así que la útima foto la  cuide, evitando cualquier intervencionismo extranjero.

Tarde bellamente nublada


Buena foto aquí se aprecia claramente las esculturas principales, obra del artista italiano Enrique Alciati…


Inevitablemente también soy un grinch de fiestas patrias.

noviembre 24, 2010

Entre primates andamos



Prefiero ser un mono transformado que un hijo degenerado de Adán.
 
Paul Broca


 La evolución debería ser una de las primeras cosas que se aprenden en la escuela... ¿y qué les dan a los niños en cambio? Sagrados corazones e incienso. Superficial y vacía religión.
 
Richard Dawkins







Con motivo del “Día del orgullo primate” me permití un acercamiento multitudinario. Por lo que asistí al eventito “Yo México” que el gobierno federal preparó en el zócalo capitalino para su “abnegado” pueblo, con motivo de… de… realmente me sigo preguntando ¿que carajos estamos celebrando?. 
Así que ante la duda, festejé el 24 de noviembre rodeándome de por lo menos 40, 000 primates –cifras conservadoras-.


Y solo pá no irme en banda a tan importante conmemoración, les dejo un videíto que armé con la “colaboración” del siempre imprescindible Nano.








noviembre 17, 2010

A quien madruga, dios lo ayuda






Quizá lo recuerden por frases tales como:

“La iglesia es santa pero pecadora”
“Las bodas gay son una estupidez”
“Con perdón de dios, el estado laico es una jalada”

O una de las más recientes:
“A mí me la persignan”

A los 33 años trabajó como corredor de bolsa, amigo de Carlos Slim con el que fundó la casa de bolsa Inbursa, colaborador de Roberto Hernández Ramírez, aficionado a la fiesta brava y al golf, también fue cantante de un grupo musical, tenista, coqueteó con la corriente de la teología de la liberación –de la que después renegó-. 
Todo esto antes de convertirse en sacerdote, suceso al que el mismo se refiere: “Tenía con qué vivir y con qué vivir muy bien, entonces me metí al sacerdocio, lo que no implica haber hecho algún voto de pobreza, tengo los votos de castidad y de obediencia al Papa”.

Actualmente es el obispo de la Diócesis de Ecatepec –la más poblada del mundo- y su meta máxima, según él “convertirse en santo”.

Efectivamente me refiero al  prelado rico de los pobres: Onésimo Cepeda Silva.


Aquí en su santo oficio

Acá con sus devotas feligresas


Resulta que este siniestro personaje, nuevamente se ve envuelto en actos de impunidad, que sobrepasa mi sentimiento de indignación. La lista de atropellos de este sujeto es larga y más o menos conocida –o más menos ocultada- La historia  es la siguiente: –esperando no resulte demasiada chorera-.



En noviembre del 2003 fallece Olga Azcárraga Madero, hermana de Rogerio Azcárraga  empresario radiofónico presidente de Grupo Fórmula,  y tía del actual presidente de Televisa Emilio Azcárraga Jean. Su esposo era Ernesto Robles León, director de la empresa Bacardí.

 La Sra. Olga  fundó en 1976 la sociedad anónima; Arthinia Internacional  establecida para el resguardo de  44 cuadros de su propiedad, acervo que cuenta con pintores famosos de la talla de:
Francisco de Goya, Pablo Picasso, Salvador Dalí, Marc Chagall, Amedeo Modigliani, Oskar Kokoschka… Tampoco faltan en su colección cuadros de los pintores mexicanos, que pueden considerarse patrimonio nacional: Naturaleza, de Diego Rivera; Tunas, de Frida Kahlo; Mujer caminando, del oaxaqueño Rufino Tamayo; El baile, de Francisco Goitia así como cuadros de Leonora Carrington y José Clemente Orozco, entre otros.

 En esos años compartían la administración y disposición de los bienes de Arthinia Internacional; Rogerio Azcárraga Madero y Jaime Matute Labrador –hermano y sobrino político respectivamente, de la difunta-. 

El nombramiento de Matute  como director, fue formalizado el 29 de junio de 1998, pero fue anulado por la asamblea de accionistas el 21 de enero de 2003 y se le pidió que rindiera cuentas de su gestión, lo cual no hizo.

A la muerte de Olga ambos “administradores” se repartieron las obras de arte, utilizando como argumento un supuesto documento –que no testamento- que la difunta firmara expresando aparentemente ese deseo –se sospecha que Doña Olga le firmaba en blanco al rufián de Matute-.



Años después, Arthinia Internacional inicia un juicio para recuperar los cuadros. En esas estaban cuando Jaime Matute –que nombre de marrullero tiene- se saca de la manga un documento por demás inverosímil.

Un pagaré por 130 millones de dólares, monto que supuestamente recibió doña Olga, en EFECTIVO y donde se comprometía a pagar incondicionalmente a la orden de… -¿de quién creen?- del Sr. Onésimo Cepeda Silva. 
Con todo y que por ser un ministro de la Iglesia– está “impedido legalmente” para celebrar actos mercantiles con “fines de lucro”, de acuerdo con la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público. Conforme a los artículos 5, 8, 9 y 12 de dicha ley.

El insólito pagaré

Este documento lo presentó Matute ni más ni menos que endosado a su favor por el funesto Obispo. Con lo cual pretende avalar el monto que ampara el valor de los cuadros y por lo tanto mantener su posesión.

Sin duda estamos ante un fraude no solo monumental, sino depravadamente inadmisible y soez.

 Aunque pareciera un ejercicio bizantino permítanme dejarles en el aire unas preguntas:

¿De dónde saco Onésimo 130 millones de dólares?

¿Bajo qué oscuro contubernio, le endoso el pagare a Matute?

¿Cómo entrego Onésimo el efectivo?
Basta recordar el escandalo del presunto narcotraficante Zhenli Ye Gon, a quien se le hallaron 207 millones de dólares en efectivo, en su mayor parte billetes de 100 dólares – ¿recuerdan el espacio que ocupaba?-

Más de la mitad de este tambache




Y esta última:

¿Esta vez sí habrá sanción, para el poseedor de tan divina impunidad?

La PGJDF le remitió un citatorio al obispo para que se presentara a declarar, ante el Ministerio Público en calidad de “indiciado” el 13 de noviembre, pero Onésimo no se presentó, aquí fue donde soltó la perla  arriba mencionada: “A mí me la persignan”.  El obispo tiene su segundo citatorio para este 22 de diciembre.

Estaremos al pendiente.